¡Que rico se siente recibir una palabra de Dios (promesa)! Pero que incomodo es cuando esa promesa como que se desvanece cuando llega la oposición. Pareciera ser que en vez de recibir una promesa, recibimos una amenaza del enemigo. Se levanta el infierno, aquellos que dijeron estar contigo ya no están, desaparecen las finanzas y con todo eso llega el desanimo, acompañado por la duda y hay es donde comienza a desvanecer la fe.
Pero no te alarmes, esa palabra esta vigente, Dios hablo y su palabra es ley. El enemigo escucho y va a intentar hacer todo lo posible para que tu fe mengue pero resiste. Recuerda que si nos sometemos a Dios y resistimos al diablo el huir de nosotros (Santiago 4:7). Lo que nos va a ayudar a vencer la oposición es la fe en Jesucristo y su Palabra.
La fe es el motor que nos mantiene activos, en movimiento, caminando en dirección a lo prometido.
Entonces; ¿Como podemos restaurar la fe? En Romanos 12:2 encontramos la respuesta: “No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.”
Renovar nuestro entendimiento es algo parecido a la renovación o restauración de un auto antiguo. Imagina un auto antiguo de mucho valor, el cual tiene ya mucho millaje, con golpes, daños en los interiores y necesidad de ciertas reparaciones. Por lo general cualquier otra persona lo vendería para piezas pero como usted reconoce su valor decide renovar ese auto y hacer que luzca y maneje como nuevo. Así mismo podemos hacer con la fe, y todo comienza con la renovación del entendimiento.
El entendimiento es la faculta de la mente que nos permite aprender, entender, razonar, tomar desiciones y formarnos. Un buen entendimiento afina nuestra perspectiva. Por eso es que para renovar la fe hay renovar el entendimiento y comenzar a caminar y ver por fe, conforma a la perspectiva de Dios.
La renovación de la fe comienza en nuestra mente, la cual es el centro de comando del hombre. Ella procesa, almacena y hasta tiene la capacidad de borrar información que no esta ocupando espacio en nuestra mente. La revista Fast Company publico un articulo que habla de como el cerebro hace espacio para poder conectar ciertos neuro-circuitos y procesar mas información de manera que podamos aprender cada día mas. Hemos escuchado el dicho que dice que; “la practica hace al maestro”, por ejemplo: mientras mas se practica mas fuerte se hacen los circuitos relacionados con esa actividad.
La mente es como un jardín donde cada uno de esos circuitos (pensamientos) son como una semilla que crece cuando se le da atención y cuidado, o un semilla que muere cuando no se le presta atención.
Todo lo que atiendas y le dediques tu atención tendrá vida en ti, y todo lo que ignores morirá.
La mente tiende a desarrollar aquellos pensamientos que tenemos presentes y a enviar al olvido a aquellos que hemos ignorado. Por eso tienes que decidir a que le vas a prestar tu atención; si a la palabra que Dios hablo de ti o la oposición, si a los que se fueron o los que todavía están contigo y te apoyan, si a lo que perdiste o lo que realmente tienes. Porque la oposición llego para formarte, los que se fueron no estaban destinados para estar contigo en esta temporada, y realmente no haz perdido nada sino que Dios removido lo estaba iba a ser un estorbo. Por eso tienes que entrenar tu mente ejercitando la fe, teniendo la palabra de Dios siempre presente, creyendo en ella y descansando en el Señor.
Descansar en el Señor no tan solo trae paz sino que también es muy productivo. Cuando no se descansa la mente literalmente se sobrecarga. En el descanso de la noche la mente organiza los pensamientos que han estado siendo atendidos y elimina toda esa información que hemos puesto de un lado. La mente organiza los pensamientos de tal manera que el 60% del cerebro queda libre para recibir mas. Por eso Dios le dijo a Josue: “Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.” Josue 1:8
Para renovar tu fe tienes que traer a la memoria la palabra que Dios hablo de ti. Tienes que meditar en esa palabra de manera que tus pensamientos se alinean a los planes de Dios para contigo. Alinear nuestros pensamientos renuevan nuestra fe, y nos empodera para entrar en lo prometido. ¡Vamos, renueva tu fe! Haz memoria y medita en esa palabra que han resonado en tu espíritu…